La Ley propone un objetivo de descarbonización para 2050 y la orientación de todas las políticas de la UE, además de ofrecer previsibilidad a las autoridades públicas, empresas y ciudadanos. A su vez, la Comisión abre a consulta pública el futuro del Pacto Europeo sobre el Clima para que la ciudadanía forme parte de la formulación de este instrumento.