La Estrategia a Largo Plazo para una Economía Española Moderna, Competitiva y Climáticamente Neutra en 2050 (ELP) es el documento que perfila la manera en la que se alcanzaría el objetivo de neutralidad climática, a más tardar, en 2050, haciéndolo de una manera integrada que resulte lo más beneficiosa posible para la modernización y competitividad de la economía de nuestro país.
En ese sentido, el Reglamento de Gobernanza de la Unión Europea, Reglamento UE 2018/1999, señala que “las estrategias estables de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a largo plazo son claves para contribuir a la transformación económica, el empleo, el crecimiento y el logro de objetivos más amplios de desarrollo sostenible, así como para avanzar de forma justa y eficiente hacia el objetivo a largo plazo establecido por el Acuerdo de París”.
En 2019, la Unión Europea actualizó sus objetivos climáticos con el Pacto Verde Europeo, aumentando el compromiso de reducción de emisiones en línea con el Acuerdo de París. Este marco estratégico, complementado por la Ley Europea del Clima, establece la neutralidad climática como meta para 2050 y sirve de base para mitigar los efectos del cambio climático, promoviendo la adaptación y sostenibilidad. Posteriormente, en 2021, la Comisión Europea presentó el paquete legislativo «Objetivo 55», revisando directivas y reglamentos clave del sector energético para garantizar el cumplimiento de estas metas ambiciosas. Más recientemente, en febrero de 2024 la UE reforzó su compromiso con la descarbonización a través de la Comunicación «Asegurar nuestro futuro».
A nivel nacional, el 24 de septiembre de 2024 el Consejo de Ministros aprobó el envío de la actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, 2023-2030 (PNIEC), a la Comisión Europea, que supone un aumento de ambición climática y de las oportunidades asociadas a lo largo de la presente década.
Adicionalmente, de conformidad con lo establecido en el Artículo 5 de la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética, que indica que la Estrategia de Descarbonización a 2050 será revisable cada cinco años e incluirá, al menos, un objetivo intermedio de mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero indicativo en 2040.
En coherencia con lo anterior, y para asegurar el alineamiento entre la Estrategia a Largo Plazo y el resto del marco normativo y estratégico en el ámbito climático a nivel nacional y europeo, se lanza dentro del proceso de participación pública esta consulta previa sobre la actualización de la ELP.